
Un gato llamado Kiko defendió a su ama de ser mordida por una víbora venenosa, conocida como jarara.
De acuerdo al informe de Noticias Paraguay, la mujer pisó la serpiente y su mascota reaccionó para defenderla.
Kiko fue mordido en el cuello por la jarara, pero tiene posibilidades de sobrevivir ya que está siendo medicado.